¡Detén el ruido de los frenos! ¡Aprende cómo solucionarlo aquí!
Tabla de contenidos:
- Introducción
- Cómo funcionan los frenos
- Razón 1: Vibración entre los componentes metálicos
3.1. Problema común: Ruido de vibración al frenar
3.2. Solución: Reemplazar las almohadillas y lubricar correctamente
- Razón 2: Roce de la lengüeta de freno contra el rotor
4.1. Indicador de desgaste de las almohadillas de freno
4.2. Solución: Reemplazar las almohadillas y limpiar la superficie
- Razón 3: Cristalización cercana
5.1. Causas de la cristalización cerca
5.2. Solución: Reemplazar las almohadillas y resurfacing de los rotores
- Razón 4: Desgaste desigual de las almohadillas de freno
6.1. Problema común: Desgaste excesivo de una almohadilla
6.2. Solución: Reemplazar las almohadillas y verificar el funcionamiento del calibrador
- Razón 5: Desgaste inclinado o cónico
7.1. Problema común: Desgaste desigual causado por la falta de lubricación de los pasadores del calibrador
7.2. Solución: Lubricar adecuadamente los pasadores y verificar el funcionamiento del calibrador
- Conclusión
Razón 1: Vibración entre los componentes metálicos 💥
Uno de los problemas más comunes que puede causar el ruido de los frenos es la vibración entre los componentes metálicos. Esto puede ocurrir cuando el calibrador entra en contacto con las almohadillas de freno o cuando estas últimas rozan contra el hardware del freno. Para evitar este tipo de ruido molesto, es importante corregir el contacto metálico y eliminar las vibraciones.
Si tienes suficiente material de almohadilla de freno, pero escuchas un chirrido al frenar, es posible que se deba a este problema. En este caso, las almohadillas de freno de alta calidad utilizan placas traseras de goma para eliminar el ruido causado por la vibración del calibrador contra las almohadillas. Sin embargo, al desgastarse o corroerse, estas placas pueden ser las culpables del ruido. Para solucionarlo, simplemente reemplázalas y asegúrate de lubricar correctamente las áreas donde las almohadillas se mueven.
Recuerda que un lubricante adecuado también debe aplicarse en estos lugares para evitar la vibración y el roce entre el hardware del freno y el calibrador. Con una pequeña cantidad de lubricante, lograrás una distribución equitativa del frenado y evitarás los molestos ruidos. Asegúrate de usar el mismo lubricante en el nuevo hardware de freno y en las áreas donde las almohadillas se deslizan hacia adelante y hacia atrás. También es importante aplicar lubricante en la parte posterior de las nuevas almohadillas de freno utilizando las marcas dejadas por las almohadillas antiguas como referencia.
Recuerda que el ruido de los frenos puede ser causado por diferentes factores, así que si este problema persiste, es recomendable buscar la asesoría de un profesional. Mantener los componentes del sistema de frenos en buen estado es fundamental para garantizar tu seguridad y la de los demás en la carretera. ¡No subestimes la importancia de unos frenos en buen estado!