¡La lucha de un médico extranjero durante 13 años para quedarse en Estados Unidos!
¡La lucha de un médico extranjero durante 13 años para quedarse!
Tabla de contenido
- Introducción
- Mi formación médica en los Estados Unidos
- Como interna en el Hospital St. Vincent
- Residencia en PMR en la Clínica Mayo
- Especialización en medicina deportiva en la Universidad de Iowa
- Mi experiencia como inmigrante en los Estados Unidos
- La pandemia de COVID-19 y mi voluntariado en primera línea
- Los desafíos del proceso de visa
- La confusión del proceso de transición de visas
- Restricciones de viaje y problemas con mi estatus migratorio
- Obstáculos para obtener una residencia permanente
- La negativa a mi solicitud de residencia permanente durante la pandemia
- El impacto emocional y la lucha personal
- Apoyo y reacción en redes sociales
- Mi lucha contra el sistema de inmigración
- La importancia de los trabajadores inmigrantes en el sistema de atención médica
- Conclusiones y reflexiones personales
¡Mi lucha de 13 años como médico extranjero en los Estados Unidos!
Como médico, he pasado los últimos 13 años en una lucha continua para quedarme en los Estados Unidos y ejercer mi profesión. Durante este tiempo, he enfrentado desafíos significativos, obstáculos burocráticos y el impacto emocional de la pandemia de COVID-19. Mi historia es solo un ejemplo de las dificultades que muchos trabajadores inmigrantes en el sector de la atención médica enfrentan a diario.
Comenzaré compartiendo mi formación médica en los Estados Unidos. Como interna en el Hospital St. Vincent, tuve la suerte de recibir una excelente educación y capacitación. Luego, continué mi residencia en PMR en la prestigiosa Clínica Mayo, donde pude desarrollar mis habilidades médicas y especializarme en medicina deportiva en la Universidad de Iowa.
Sin embargo, ser un médico inmigrante en los Estados Unidos no ha sido fácil. He tenido que enfrentar numerosos desafíos relacionados con el proceso de visa. Cada vez que me mudaba para completar una etapa de mi formación, mi hospital debía solicitar una transición de mi permiso de trabajo, lo cual implicaba gastos adicionales para ellos. Además, cuando mi visa estaba en proceso de renovación, no podía abandonar el país sin arriesgar mi empleo y mi estatus migratorio.
El proceso de obtener una residencia permanente también ha sido extremadamente complicado. A pesar de mi experiencia y destacada trayectoria profesional, me encontré con obstáculos al demostrar mi experiencia y conocimientos médicos requeridos para la solicitud de la tarjeta verde. El gobierno no tiene en cuenta el tiempo de entrenamiento y residencia de los médicos, lo cual me perjudicó al proporcionar evidencia de mi experiencia en el campo.
Lamentablemente, la pandemia de COVID-19 empeoró mi situación. En noviembre de 2019, mi visa H1B venció mientras mi solicitud de autorización de empleo estaba pendiente. Como resultado, mi empleo tuvo que ser terminado y me vi obligada a tomar una licencia no remunerada de mi hospital. Durante este tiempo, no pude viajar, no tenía ingresos y no sabía cuándo se aprobaría mi autorización de empleo.
La situación se volvió aún más desafiante cuando recibí la noticia de que mi solicitud de residencia permanente había sido denegada. Después de 13 años en los Estados Unidos, me encontré en el limbo de ser deportada. Afortunadamente, gracias a la atención mediática que recibió mi caso y la intervención de mi abogado, la decisión fue revocada y finalmente aprobada.
Sin embargo, esto no es el final feliz para todos los trabajadores inmigrantes en el campo de la medicina. Hay más de dos millones de inmigrantes que trabajan en la industria de la atención médica en los Estados Unidos, y aproximadamente el 25% de los médicos son extranjeros. Negar la entrada a trabajadores de la salud es una postura que no tiene sentido en este momento, especialmente durante una pandemia.
La inmigración y la diversidad son lo que hace grande a Estados Unidos. La mayoría de nosotros consideramos este país nuestro hogar, habiendo establecido nuestras vidas y comprometido con la sociedad. Sin embargo, el sistema de inmigración está roto y está afectando a los médicos inmigrantes que están luchando contra la pandemia en primera línea mientras lidian con un sistema arcaico que busca debilitarlos.
Agradezco profundamente el apoyo que recibí de muchos durante mi lucha, pero también reconozco que mi historia no es la historia de todos los trabajadores inmigrantes. Es fundamental comprender la importancia de los trabajadores inmigrantes en el sistema de atención médica y trabajar hacia una reforma migratoria que brinde un camino más claro y justo para aquellos que contribuyen enormemente a nuestra sociedad.
En conclusión, después de 13 años, numerosas visas de trabajo, una pandemia y estar al borde de la deportación, finalmente puedo decir que soy una residente permanente de los Estados Unidos de América. Sin embargo, este logro no debería haber sido tan difícil ni debería haber requerido tanto esfuerzo. Espero que mi historia pueda generar conciencia y generar cambios en el sistema de inmigración para facilitar la vida de otros trabajadores inmigrantes y profesionales médicos en el futuro.
✨ Destacados:
- Una lucha de 13 años para obtener la residencia permanente en los Estados Unidos.
- La complicada realidad de los trabajadores inmigrantes en el sector de la atención médica.
- Los desafíos del proceso de visa y la falta de reconocimiento de la formación médica.
- El impacto emocional de la pandemia de COVID-19 en un médico inmigrante.
- El llamado a valorar y apoyar a los trabajadores de la salud inmigrantes.
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Preguntas frecuentes
¿Cuánto tiempo tardó en obtener la residencia permanente después de que su solicitud fuera denegada?
Después de que mi solicitud de residencia permanente fuera denegada, tuve que llevar mi caso a revisión y fue un proceso largo y desafiante. Finalmente, después de varios meses, fui aprobada para mi residencia permanente en agosto de 2020.
¿Cuál es la situación actual de la reforma migratoria en los Estados Unidos?
La reforma migratoria es un tema complejo y actualmente está siendo discutido en el Congreso. Si bien no hay cambios inmediatos, existe una creciente conciencia sobre la necesidad de abordar las deficiencias del sistema de inmigración y brindar más oportunidades a los trabajadores inmigrantes, especialmente en el campo de la medicina.
¿Qué medidas se deben tomar para apoyar a los trabajadores inmigrantes en la atención médica durante la pandemia de COVID-19?
Es fundamental reconocer la importancia de los trabajadores inmigrantes en la atención médica y garantizar que tengan acceso a recursos adecuados, protección laboral y la posibilidad de mantener su estatus migratorio sin temor a la deportación. Además, se necesita una reforma migratoria integral que simplifique el proceso de obtención de visas y residencia permanente para los profesionales médicos extranjeros.
¿Cómo puede la sociedad apoyar a los trabajadores inmigrantes en la atención médica?
La sociedad puede apoyar a los trabajadores inmigrantes en la atención médica a través de la sensibilización, el reconocimiento de su contribución invaluable y la promoción de políticas y cambios que faciliten su vida y su trabajo en los Estados Unidos. Además, mostrar gratitud y respeto hacia estos profesionales es fundamental para crear un entorno de acogida y ayuda mutua.
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